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La importancia del limitador de par en las instalaciones con rascadores.

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En las instalaciones con rascadores de fangos, tanto circulares como rectangulares, es muy importante incorporar un limitador de par electrónico para proteger los equipos contra daños y tiempos de inactividad.

Un limitador de par electrónico es un componente que se incorpora al cuadro eléctrico de control para prevenir posibles averías producidas por sobreesfuerzos de tipo mecánico.

La función del limitador de par es vigilar constantemente la intensidad nominal consumida por el motor eléctrico, y en caso de sobrepasar un valor previamente fijado, éste desconecta automáticamente el motor.

 width=Un rascador de fangos, ya sea circular o rectangular, no tiene por qué tener problemas de funcionamiento si se le aplica el mantenimiento adecuado, pero sí es cierto que a veces estos equipos pueden sufrir averías.

La avería más común es que el rascador quede enganchado porque un objeto ha quedado atrapado entre sus las palas. Este objeto supone un impedimento para el giro normal del rascador, obligándolo a producir un sobreesfuerzo. Si éste es un sobreesfuerzo menor, no habrá ningún problema; pero si el objeto es lo suficientemente grande, y en consecuencia el sobreesfuerzo también, se podría producir una seria avería en alguno de los componentes del rascador: palas, eje, reductor, motor eléctrico etc.

En este caso el limitador de par actuaría, ya que la intensidad nominal consumida por el motor sobrepasaría el valor prefijado, y por lo tanto, se desconectaría eléctricamente evitando cualquier problema o males mayores. Además, el limitador de par nos avisaría con una señal para permitirnos solucionar el problema antes de poner en marcha de nuevo el rascador.

 width=También se puede dar la situación de sobreesfuerzo en el rascador si éste ha estado sin funcionar y con el decantador vacío durante el tiempo suficiente para que los restos de fango existentes se solidifiquen y dificulten el giro del rascador. En este caso, al ponerlo en marcha de nuevo, el limitador de par actuaría de la misma forma.

Si no existe limitador de par en el cuadro eléctrico, el rascador puede terminar rompiéndose provocando no sólo problemas en el mismo equipo, sino también multitud de daños en la instalación entera: lamelas, estructura soporte, etc. Convirtiéndose en un gran problema para el explotador de la planta.

En algunas obras hemos visto que la avería del rascador ha provocado una acumulación excesiva de lodos en el decantador. Si el explotador no se da cuenta, el manto de lodo puede llegar a colmatar los módulos lamelares, y en el caso que la estructura soporte no esté correctamente dimensionada, es posible que ésta colapse provocando que las lamelas se precipiten al fondo del decantador.

En conclusión, es de vital importancia incorporar un limitador de par en todas las instalaciones con equipos mecánicos como los rascadores, para detectar cualquier sobre-intensidad a tiempo y detener el equipo antes de que éste pueda ocasionar daños mayores al propio equipo y a la instalación.

08 Ago, 16

 

 

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