La importancia de instalar un rascador en un decantador
Colgado en Artículos Técnicos por TecnoConverting
Debo admitir que siempre me sorprende el grado de detalle y atención que se presta para dimensionar los decantadores lamelares, pero en cambio, no le dan ningún tipo de importancia al sistema de extracción de lodos, a la estructura soporte o inclusive, al sistema anti flotación. En diferentes artículos anteriores ya hemos descrito la importancia y el motivo del porqué tienen que calcularse correctamente; ahora bien, al respecto del rascador, es muy importante tener ciertos parámetros en cuenta:
Cuando se dimensiona un decantador lamelar, la cantidad de sólidos en suspensión que se ha de considerar es mucho mayor, ya que para una misma superficie se trata un caudal normalmente mayor. Esto significa que los lodos o sólidos que se van a precipitar al fondo de la balsa van a ser más y obligatoriamente hay que instalar un sistema que los recoja y los extraiga del decantador.
He visto decantadores cuadrados, por ejemplo, de 10 metros por 10 metros con fondo cónico, sin sistema de extracción; o inclusive decantadores de 50 metros de largo por 10 metros de ancho sin sistema de extracción. A la larga, en todos ellos se les ha tenido que adaptar algún sistema para extraer la cantidad de lodos que producen.
La experiencia me permite hacer un listado de los problemas típicos que aparecen cuando no se instala un rascador de lodos:
– Se acumulan los lodos en el fondo de la balsa y estos, con el tiempo, se desprenden y salen por la salida de agua limpia del decantador.
– Existe una bomba de extracción de lodos pero estos también aparecen en la salida del agua limpia, y curiosamente, la cantidad que extrae la bomba es muy pequeña. El motivo es que la bomba sólo extrae el lodo de una zona perimetral cercana a la bomba, pero en ningún caso recoge los lodos que están más alejados aunque el fondo del decantador sea tronco-cónico.
– Cuando hay lamelares sin sistema de extracción la cosa se complica todavía más: los lodos se van acumulando en el fondo del decantador y poco a poco van subiendo hasta obturar los paquetes lamelares. En este momento la situación empieza a ser crítica: la estructura soporte empieza a sufrir hasta que, por el exceso de peso, a veces colapsa. Además, el empuje hidráulico hace que las lamelas se levanten y parece que floten; si encima no se ha instalado sistema anti-flotación, la situación ya es terrible.
Sin lugar a dudas, nuestra recomendación es siempre la de equipar el decantador con un buen sistema de rascador de lodos.
Seguro que se evitarán males mayores.